caminaba rumbo al centro cuando en un muro de la nada sale un link a un blog (alojado en Blogspot) de graffitis. No me interesó ni lo recomendaré:
Al que pintó su muro no le interesa tu arte y si así fuera te pediría se lo rayes, vete a otro lado.
Luego compré el diario,
una bloguera viajera recomendaba cierto lugar cerca de mi ciudad.
Denme plata y hago eso mismo...
Bah,
ayer me sentí negativo y con ganas de pelear,
no me quejo,
aquello te atrae gente interesante por misteriosas razones...
Y sobretodo en mi caso al menos,
admito,
me hizo conectar
más con mis emociones,
fui feliz y
puedo perdonar al mundo entero esta noche y aquello es poco decir comparado a perdonarme a mí mismo...
Y se puede.
Y la vida es bella.
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